Nuestros consejos para cruzar los Alpes en tu bicicleta de carretera

Cruzar los Alpes en una bicicleta de carretera puede ser un desafío verdaderamente extremo. La euforia y el agotamiento, la diversión y el dolor, la alegría y el sufrimiento nunca están separados. Pedalear por las carreteras más altas de Europa con fuerza muscular: la mayoría de las personas que no han experimentado la fascinación del ciclismo probablemente considerarían esta idea como una señal de locura.

Pero para los ciclistas de carretera es sin duda una insignia de honor, y muchos de nosotros soñamos con hacerlo durante años. Asumir, por fin, este reto físico y mental después de largos meses de entrenamiento y preparación es una sensación verdaderamente única. Con la planificación de rutas, las fotos espectaculares y la persistente incertidumbre sobre si realmente tendrás éxito, cruzar los Alpes en bicicleta de carretera es una montaña rusa emocional.

Hay muchas rutas a través de los Alpes. La mayoría de las rutas transalpinas clásicas comienzan en algún lugar al sur de Munich, en Alemania, en Garmisch-Partenkirchen o Kempten.

Una ruta popular va desde Garmisch a través de la región de Seefeld hasta Tirol. Aquí, lo más destacado es el Möserer Berg, el pintoresco Pillerhöhe, Norbertshöhe, Nauders y finalmente el Paso Reschen en la frontera italiana con el famoso campanario de la iglesia que se eleva desde un depósito de agua. Después de pasar por Prad, te dirigirás al Stelvio Pass. Una de las escaladas alpinas más famosas, el legendario Stelvio Pass, a menudo se considera la joya de la corona de cualquier travesía alpina en bicicleta.

Aquí te enfrentarás a una elección difícil: disfrutar del descenso a la popular ciudad de esquí de Bormio y continuar hacia el paso de Gavia ¿o tomar un desvío a través de Suiza? En este último caso, la ruta te lleva a través de Val Müstair hasta el paso de Fuorn y luego a Bormio a través de los pasos de Eira y Foscagno. Desde Bormio, puedes subir al puerto de Mortirolo.

El paso de Mortirolo es legendario. Los lugareños llaman cariñosamente a la carretera de montaña, que es una de las subidas más empinadas y duras de todos los Alpes, la pared. Su pendiente media sobre Tovo di Sant'Agata es superior al doce por ciento.

El pintoresco paso de Gavia es otra escalada verdaderamente épica. Su tramo sur presenta varias rampas al 14 o incluso al 16 por ciento. Los ciclistas son recompensados ​​con algunos de los paisajes más hermosos a lo largo de cualquier paso alpino, especialmente alrededor del Lago Nero, justo al sur de su punto más alto.

Después del paso de Mortirolo, continúa por el Passo Tonale hasta el hermoso pueblo de Madonna di Campiglio en la región de Trentino. La última etapa combina los pasos de Daone y Durone con Passo Ballino, el último paso alpino de esta ruta. Y entonces, finalmente, lo habrás logrado: una vez que llegas a Torbole cerca de Riva en el Lago di Garda, has cruzado oficialmente los Alpes con tu bicicleta de carretera.

Sea la ruta "fácil" a través de Reschen Pass, los Dolomitas, el Stelvio Pass o el camino más corto a través de Timmelsjoch, hay una amplia gama de diferentes rutas transalpinas para principiantes y escaladores veteranos por igual.

Hablemos de cómo prepararte para tu travesía alpina, para que tu sueño de recorrer el Stelvio Pass y otras épicas carreteras de montaña en tu ruta transalpina no se convierta en una pesadilla.

Comodidad, versatilidad y velocidad duraderas: Las bicicletas de carretera de resistencia son probablemente la mejor opción para los ciclistas que quieren cruzar los Alpes a un ritmo atlético y con una buena dosis de comodidad. El ciclismo transalpino requiere una bicicleta completa que pueda manejar muchas situaciones diferentes. Con una bicicleta de carretera de resistencia, podrás permanecer más tiempo en el sillín y aprovechar al máximo tu travesía alpina sin sacrificar mucho la velocidad.

Desde modelos básicos con cuadros de aleación hasta bicicletas de carrera de resistencia de alta gama, hay una buena opción para cada presupuesto. Y si quieres estar absolutamente seguro de conseguir tu objetivo, considera la asistencia eléctrica con administración inteligente de la batería, geometría de resistencia cómoda y manejo clásico de bicicleta de carretera.

La buena noticia: incluso los ciclistas moderadamente en forma pueden cruzar los Alpes. Si recorres al menos 50 kilómetros con alrededor de 600 metros de elevación dos veces por semana de manera regular, tendrás una buena base para comenzar. Para tener una mejor idea de cómo será un día en los Alpes, también deberías intentar hacer salidas con más de 1000 metros de elevación de vez en cuando.

Una vez que estés listo para enfrentarte a los Alpes, la planificación de las etapas es crucial. Debes poder concentrarte en seguir tu propio ritmo en cada etapa. También debes asegurarse de mantenerte al tanto de tu nutrición con muchos carbohidratos y bebidas isotónicas.

“El cuerpo humano solo puede procesar de 60 a 90 gramos de ingesta de carbohidratos por hora, pero puede quemar hasta 200 gramos de energía. Como regla general, muchos ciclistas comen una barra por hora por cada 25 kg de peso corporal. Para un ciclista de 75 kg, eso significa comer tres barras por hora. Según el calor, también se debe beber entre 0,75 y 1 litro de líquidos isotónicos por hora”.

Como principiante, debes incluir al menos un día de descanso en el itinerario transalpino. El día de descanso debe llegar después del segundo o quizás tercer día de pedalear. Un día de descanso es una oportunidad importante para que tu cuerpo se recupere.

Si cruzas los Alpes solo con tu bicicleta de carretera, la principal ventaja es que siempre puedes marcar tu propio ritmo y hacer que cada etapa sea tan larga o corta como quieras. Pero también hay una desventaja: la mayoría de los ciclistas terminan pasando demasiado tiempo en la silla de montar cuando se les deja solos. Un grupo puede ayudarte a superar tramos difíciles, taparte corrientes de aire ocasionales para que pueda recargar y mejorar tu seguridad general. No tendrás estos beneficios si viajas solo. Sin embargo, es casi seguro que conocerás a otros ciclistas en los Alpes con los que podrás formar equipo durante un tiempo.

Para la mayoría de nosotros, viajar en una grupeta es el doble de divertido. Si deseas pedalear por los Alpes con tus amigos, debes asegurarte de comunicar bien los niveles de condición física. Debes saber de antemano si podrás mantener un ritmo similar durante varios días. Las principales características de un buen grupo son el espíritu de equipo y la solidaridad. Cruzar los Alpes con amigos no es ni el momento ni el lugar para competir. Los ciclistas demasiado entusiastas pueden aprender mucho al ocupar la parte trasera por un tiempo y cuidar bien a sus compañeros menos diestros.

Una visita guiada con alojamiento preestablecido y una nueva muda de ropa esperando al final de cada etapa es sin duda la forma más relajada de viajar. Es por eso que a algunos ciclistas les gusta reservar una travesía alpina guiada de compañías de renombre.

Un buen guía te asegura que incluso un grupo más grande de 16 ciclistas encuentre el recorrido igualmente agradable. Se trata de asegurarse de que los ciclistas más rápidos puedan divertirse sin que los ciclistas más lentos se sientan inseguros. Por lo general, esto significa separarse en las montañas empinadas y mantener al grupo unido en las llanuras. Aquellos con energía de sobra siempre pueden ser de ayuda para sus compañeros más débiles.

Tu guía y conductor también debe estar familiarizado con el área y asegurarse de que la camioneta esté siempre en una buena posición. De esa forma, puede recoger a los ciclistas que no pudieron subir u ofrecerles un cambio de ropa antes de los grandes descensos. Los guías experimentados también tienen un buen sentido del equilibrio adecuado entre los descansos y el tiempo de conducción.

Los sitios web de revistas de ciclismo y muchas aplicaciones para actividades al aire libre ofrecen una selección de rutas para cruzar los Alpes en una bicicleta de carretera. Por lo general, están disponibles como descarga GPX, así como otros formatos de uso común. De esa manera, solo tienes que descargarlos a tu ciclocomputador y comenzar a navegar cuando estés listo para comenzar. Y hay rutas para todos los ciclistas: desde principiantes hasta cabras montesas certificadas, todo el mundo puede encontrar una buena opción.