Bicicleta de triatlón frente a bicicleta de carretera: descodificar la elección

Tanto si entrenas para tu primer triatlón como si tienes anotada la fecha del Ironman Kona en el calendario, quieres ser rápido. Una de las decisiones más difíciles a las que se enfrentan los triatletas prometedores es elegir entre una bicicleta de carretera estándar o un modelo aerodinámico específico para triatlón. ¿Vale la pena comprar otra bicicleta?  

Una bicicleta de triatlón (una versión ligeramente modificada de una bicicleta de contrarreloj que podrías ver en una carrera de ciclismo profesional) está diseñada para hacer una cosa: ir lo más rápido posible. Todo en ella, desde el manillar hasta las formas de los tubos y tu posición sobre ella, está diseñado para mejorar la aerodinámica. (Hay una razón por la que los ingenieros de Canyon pasan tanto tiempo en túneles de viento). 

Por el contrario, una bicicleta de carretera normal va a ser más versátil, cómoda, mejor para subir cuestas y más fácil de manejar. Son rápidas, pero no tan rápidas como una bicicleta de triatlón, e ideales para recorrer muchos kilómetros mientras entrenas o simplemente para divertirte pedaleando con amigos. 

¿Alguna vez te has planteado los contrastes que existen entre las bicicletas de triatlón y las de carretera? ¿Qué define sus características y funciones únicas? Desentrañemos las características distintivas que distinguen a estas dos compañeras de ciclismo.

La geometría del cuadro de una bicicleta de triatlón difiere de la de una bicicleta de carretera estándar. Debido al ángulo más pronunciado del tubo del sillín de una bicicleta de triatlón, el sillín se asienta casi directamente encima del pedalier. Entre eso y una distancia entre ejes más corta, el triatleta está situado en una posición más adelantada que en una bicicleta de carretera estándar. Esa posición implica más a tus cuádriceps y ayuda a reducir la tensión en los isquiotibiales, para que tus piernas estén más frescas durante el segmento de carrera. Pero, como el centro de gravedad cambia, tomar curvas y descender en una bicicleta de triatlón puede resultar más difícil. 

Los tubos de bicicleta de triatlón suelen ser más angulares, y los últimos modelos incluyen guiado interno de cables, hidratación integrada y almacenamiento de accesorios, todo ello diseñado para eliminar cualquier resistencia al aire innecesaria. La horquilla delantera de la Speedmax se ha diseñado específicamente para proteger las pinzas de freno de disco del viento, reduciendo así aún más las turbulencias. 

Las bicicletas de carretera cuentan con manillares curvos, en los que los ciclistas apoyan las manos en la parte superior y en las manetas para una posición más relajada o en los cuernos para una más agresiva. Tanto las manetas de cambio como las manetas de freno están a un dedo de distancia. Debido a la posición de las manos y el cuerpo, manejar la bicicleta es relativamente sencillo, pero esa posición más erguida significa más resistencia, lo que, en última instancia, significa una conducción algo más lenta. 

Las bicicletas de triatlón utilizan manillares especiales que obligan al ciclista a encorvarse hacia abajo y hacia adelante, con un perfil más estrecho. Por lo general, esto no es supercómodo para largas distancias, como un segmento de bicicleta en Ironman de 180 km, pero el cockpit de la Speedmax tiene 110 mm de capacidad de ajuste que te permite ajustar más fácilmente tu posición. Si bien puedes cambiar de marcha con solo pulsar un dedo en esa posición aerodinámica, para frenar es necesario mover las manos hacia el manillar exterior. Si bien la Speedmax es más reactiva que muchas otras bicicletas de su categoría, no es óptima para frenar de manera repentina y girar con agresividad. 

Los componentes serán aproximadamente los mismos en las bicicletas de carretera y triatlón con un precio similar, aunque es posible que tengan ligeros ajustes para ser más aerodinámicos. La mayoría de los triatletas serios eligen ruedas como las Zipp 858s (estándar en la Speedmax CFR eTap), con llantas más profundas y aerodinámicas que cortan el viento. Esas llantas de ruedas profundas dificultan la conducción en condiciones de viento cruzado, por lo que no las verás a menudo en las bicicletas de carretera estándar. 

La mayoría de los triatletas empiezan con cualquier bicicleta que tengan en el garaje. Si te fijas en el área de transición en un triatlón de sprint, es probable que veas un número igual o mayor de bicicletas de carretera que los modelos específicos para triatlón. (¡Probablemente verás también algunos novatos con bicicletas de montaña antiguas!) 

Si actualmente no tienes bici, es posible que no quieras saltar directamente a una bicicleta de triatlón. Los nuevos triatletas suelen considerar que una bicicleta de carretera estándar es más flexible, tanto en la conducción como en la posición del cuerpo. Los atletas que no tienen mucha experiencia en bicicletas deberán pasar tiempo pedaleando y haciéndose a una bicicleta estándar antes de pasarse a una bicicleta de triatlón. 

Una bicicleta de carretera como la Canyon Aeroad puede ser un buen puente entre una bicicleta de carretera normal y un modelo específico para triatlón, ya que ofrece múltiples ventajas aerodinámicas sin renunciar a las características de conducción de una bicicleta de carretera más estándar. 

A medida que te vas tomando en serio lo de competir, es probable que busques formas de reducir tus marcas. Cuanto más rápido seas, más aerodinámica entrará en juego. Según las pruebas realizadas por el canal de YouTube Global Triathlon Network, un atleta ahorrará entre 37 y 49 vatios al pedalear a 30 km/h (18,5 km) y unos asombrosos 114 y 150 vatios al pedalear a 45 km/h (28 km) debido al diseño aerodinámico de la bicicleta y a la posición de tu cuerpo sobre ella. En la mayoría de los circuitos, una bicicleta de triatlón te sacará segundos o incluso minutos de la parte de bicicleta, lo que la convierte en una de las maneras más fáciles de acelerar con poco o ningún esfuerzo adicional.

En primer lugar, no tienes por qué elegir. Si tu presupuesto y tu garaje lo permiten, no hay nada de malo en tener una bicicleta de carretera y otra de triatlón; después de todo, son diferentes herramientas para diferentes tareas. Si es posible, prueba ambas bicicletas con un colaborador Canyon Experience o durante una prueba a domicilio de 30 días. 

Pero, si tu cartera o tu pareja te ponen pegas, ten en cuenta lo siguiente.

Elige una bicicleta de carretera si: 

• Solo haces triatlones de vez en cuando y no te importa en qué puesto quedes de la clasificación. 
• Agradeces el compañerismo y te gusta rodar con otras personas. 
• Tu presupuesto o tu espacio se limitan a una bicicleta. 
• Te gusta rodar por carreteras montañosas o técnicas. 

Elige una bicicleta de triatlón si: 

• Haces triatlones con frecuencia. 
• Tus tramos en bicicleta te mantienen lejos del podio de tu grupo de edad. 
• Tienes previsto hacer un ajuste de tu bicicleta después de la compra. 

Como afirman muchos propietarios satisfechos de la Speedmax, comprar una bicicleta de triatlón no era un requisito para competir, pero, en la mayoría de los casos, desde la comodidad adicional hasta la velocidad añadida, mejora toda la experiencia.  

Cuando abres la caja por primera vez, no solo estás comprando una bicicleta nueva, sino que estás entrando en un mundo lleno de posibilidades. ¿Quién sabe adónde te llevará esa nueva bici? ¿Podría ser una nueva mejor marca personal en tu próxima carrera o quizás incluso el primer peldaño del podio? Solo hay una manera de averiguarlo.