¿Cuál es el mejor material para el cuadro de una bicicleta gravel? ¿Aluminio o carbono?

Cuando se inventaron las bicicletas, estas tenían cuadros de acero. Sin embargo, la tecnología mejoró y las bicicletas de aluminio alcanzaron la fama. El motivo de su prestigio fueron las cualidades ligeras aunque robustas de este material. El último avance en materiales de cuadros ha sido la fibra de carbono. Es ligera, rígida y se puede moldear hasta darle la forma de cualquier diseño de tubo.

Las bicicletas gravel son un fenómeno muy reciente (algunos incluso piensan que hay truco). En gran parte, su popularidad se debe a la versatilidad que ofrecen. ¿Quieres pedalear por carretera? Infla los neumáticos y listo. ¿Quieres recorrer ese pequeño sendero que nadie conoce? Adelante. ¿No sabes lo que te podrías encontrar durante la ruta? Una bicicleta gravel sea probablemente la opción adecuada.

Su reciente lanzamiento al mercado se traduce en que los consumidores han tenido el lujo de poder elegir el material del cuadro desde el principio.

El material del cuadro que elijas para la bicicleta gravel depende en gran medida de tus objetivos, presupuesto y preferencias personales.

A fin de ayudarte a decidir si elegir aluminio o carbono, vamos a echar un vistazo a las ventajas e inconvenientes de ambos materiales.

Las bicicletas gravel de aluminio son el caballo de tiro de tu colección de monturas, ya que son geniales para cualquier situación a la que te enfrentes a los pedales.

Los modelos de aluminio suelen ser más económicos que sus equivalentes de carbono. Puedes gastar lo que te sobre en accesorios como alforjas o un kit de ciclismo para gravel.

Las rutas de larga distancia en bicicleta son fantásticas sobre una bicicleta gravel con el cuadro de aluminio. Pueden llevar portaequipajes, lo que significa que podrás cargar ropa de repuesto, el equipo de la cámara, equipamiento de senderismo y muchas otras cosas.

1. Robustas y duraderas, listas cuando tú lo estés. Ideales para usar como bicicleta de carretera de invierno gracias a su gran espacio para montar cubiertas

2. Económicas, lo cual que te permite gastar más en herramientas y accesorios

3. Adecuadas para portaequipajes y para llevar equipaje en rutas de larga distancia

1. Ligeramente más pesadas que las de carbono

2. A menudo tienen pocas opciones en cuanto a componentes

Las bicicletas gravel de aluminio son excelentes en todas las superficies, incluidas las carreteras. De hecho, algunos ciclistas prefieren utilizar una bicicleta gravel de aluminio como bicicleta de carretera de invierno debido al grosor de sus neumáticos y a la durabilidad de su cuadro.

También hemos visto que las bicicletas gravel de aluminio se utilizan para ir al trabajo debido a la mayor comodidad que ofrecen.

A la pregunta sobre qué material del cuadro es “mejor”, no hay respuesta afirmativa o negativa. Depende del uso que quieras darle a la bicicleta. Si quieres llevar alforjas y rodearte de naturaleza, una bicicleta gravel de aluminio es la herramienta perfecta. Si buscas una bicicleta gravel rápida y ligera, una bicicleta gravel de carbono es la mejor opción.

Las pruebas realizadas han demostrado que los cuadros de aluminio y carbono poseen una durabilidad similar. Si se te abolla el cuadro de aluminio mientras pedaleas, es posible que puedas continuar (dependiendo de la gravedad de la abolladura), mientras que es menos probable que sea así con un cuadro de carbono.

Dado que muchos de nuestros cuadros de carbono están hechos de fibra de carbono de bajo módulo (una fibra más flexible que su equivalente de alto módulo), los cuadros son capaces de soportar mucho más. Como la fibra de carbono es un material anisotrópico (lo que significa que la rigidez del material depende de la dirección), nuestros ingenieros pueden optimizar la resistencia en zonas vulnerables del cuadro. Esto permite una dinámica de conducción y un manejo superiores.

El precio a pagar por usar fibra de carbono de bajo módulo es un ligero aumento de peso, pero para la mayoría de los ciclistas este aumento será totalmente despreciable.

La fibra de carbono es un material excelente para los cuadros de bicicletas gravel debido a sus cualidades ligeras, rígidas y altamente personalizables. Una bicicleta más ligera es sinónimo de una transferencia de potencia más eficiente. Las bicicletas gravel de carbono son la bicicleta gravel preferida de los ciclistas que quieren una montura de alto rendimiento para el ciclismo en carretera y fuera de ella.

No es ningún secreto que el carbono es un material de fabricación más caro. El laminado de carbono lleva tiempo y conlleva más precisión. El laminado es lo que hace que la bicicleta sea más cómoda, ya que el material puede ser más rígido en ciertas direcciones para absorber mejor los impactos y las vibraciones.

El aspecto de un cuadro de carbono puede ser muy diferente al de un cuadro de aluminio. Igual que ocurre en las bicicletas de carretera de carbono, las formas de los tubos se pueden perfeccionar para mejorar la aerodinámica y la estética.

1. Ligeras, resistentes y cómodas gracias al carbono

2. A menudo se equipan con componentes superiores

3. Ideales para viajes con alforjas y bolsas ligeras

1. Más caras que las equivalentes de aluminio

2. Difíciles de reparar si se rompen

Las bicicletas gravel de carbono pueden durar mucho tiempo si las cuidas bien. Asegúrate de limpiar la bicicleta gravel con regularidad y comprueba si le aparecen grietas o manchas.

Piensa por dónde vas a montar tu bicicleta gravel y qué tipo de carreras o aventuras quieres vivir con ella. Una vez que lo hagas, puedes decidir qué bicicleta gravel (aluminio o carbono) es la mejor para ti. En cuanto te llegue la nueva bici gravel, consulta cómo montarla para que puedas ponerte en marcha lo antes posible.